Se trata del diagnóstico que tuvo Leo Messi a los 9 nueve años. La reguladora local ANMAT aprobó el uso de una terapia que podría reemplazar en algunos casos a la ya utilizada para el déficit de la hormona somatropina.
A nivel global, cerca de uno de cada cuatro mil niños tiene talla baja como consecuencia de una deficiencia en la hormona de crecimiento. Se trata de la hormona somatropina, que se produce en la glándula hipófisis -o pituitaria, ubicada en la base del cráneo-, y que en algunos casos, es secretada de manera insuficiente.
Las causas pueden ser idiopáticas (sin causa) o deberse a alteraciones genéticas, tumores, infecciones o traumatismos, que generan lesiones en el sistema nervioso central.
Los niños con deficiencia de hormona de crecimiento crecen menos o lo hacen a menor velocidad que sus pares, pero las consecuencias del déficit de somatropina van mucho más allá de una baja talla, de allí la importancia de diagnosticar a tiempo esta condición para que el menor pueda acceder cuanto antes al tratamiento.
Hasta el momento, el tratamiento para esta deficiencia, disponible hace casi 40 años, es la aplicación diaria de una hormona de crecimiento recombinante, por vía inyectable. Fue el que usó el capitán de la selección argentina, Lionel Messi, diagnosticado con esta enfermedad a los nueve años.
Pero más allá de lo molesto que puede resultar para un niño tener que recibir a diario una inyección, sumado a que según la edad en que se diagnostica esta enfermedad el tratamiento puede durar hasta diez años, la frecuente baja adherencia y el impacto emocional que este abordaje genera llevaron a la ciencia a buscar alternativas superadoras.
¿En qué radica la novedad de la nueva droga?
Durante la presentación del laboratorio Pfizer, especialistas destacaron que “la seguridad y eficacia de somatrogon en el tratamiento de niños y adolescentes con deficiencia de la hormona de crecimiento fueron evaluadas en dos estudios clínicos aleatorizados y multicéntricos”.
Según explicaron, ambos estudios demostraron que somatrogon administrado una vez a la semana fue no inferior a la somatotropina administrada diariamente en términos de velocidad de crecimiento anualizada tras 12 meses de tratamiento.
La médica endocrinóloga pediatra y jefa del Servicio de Endocrinología del Hospital Nacional de Pediatría “Juan P. Garrahan”, Marta Ciaccio (MN 67.484) explicó a este medio que “se trata de una molécula de hormona de crecimiento, a la cual se le han unido tres copias del péptido C-terminal (CTP) derivado de la hormona gonadotrofina coriónica humana realizada por tecnología de ADN recombinante”.
“Los CTP prolongan la vida media del somatrogon, permitiendo una dosificación semanal en lugar de diaria, que es lo habitual con las hormonas de crecimiento -ahondó la especialista-. El mecanismo de acción es similar a las hormonas de crecimiento de aplicación diaria, ya que somatrogon se une al mismo receptor de hormona de crecimiento y desencadena la acción”.
La vida media del somatrogon es de 24 horas y persiste su acción por siete días.
Fuente: Infobae