Axel Adrián Araneda fue imputado por el delito de homicidio culposo agravado por manejar con actitud temeraria y bajo la ingesta de alcohol
El joven acusado de protagonizar el brutal choque que le costó la vida a cuatro integrantes de una familia en la Ruta Nacional 22, en la localidad rionegrina de Allen, fue formalmente imputado y deberá cumplir prisión preventiva mientras avanza la investigación.
La Justicia determinó que conducía bajo una combinación de alcohol, drogas, uso del celular y exceso extremo de velocidad, condiciones que, según la fiscalía, conforman un cuadro de “temeridad absoluta”.
El Ministerio Público Fiscal de Río Negro confirmó que el imputado, identificado como Axel “Chinito” Araneda, circulaba en su Volkswagen Amarok a una velocidad mínima de 170 km/h cuando embistió por detrás a una Ford EcoSport que estaba detenida en la banquina izquierda. Dentro del vehículo viajaban cuatro miembros de una familia de Catriel: dos mujeres adultas y dos niños, quienes fallecieron en el acto.
La violencia del choque fue tal que la EcoSport fue arrastrada más de 37 metros y se incendió por completo.
En el lugar murieron Liliana Cocuzza, médica reconocida en Catriel; su hija Carina Gutiérrez y dos nietos menores de edad. El esposo de Cocuzza, Justo Pastor Gutiérrez, que se encontraba fuera del vehículo acomodando el equipaje, fue el único sobreviviente: resultó gravemente herido y permanece internado en el Hospital de Allen.
Las pericias indicaron que los cuatro ocupantes del vehículo fallecieron de manera instantánea por la magnitud del impacto y, en el caso de los niños, por inhalación de hollín durante el incendio posterior.
La acusación sostiene que Araneda conducía de forma “imprudente y antirreglamentaria”, no solo por su estado, sino por su conducta durante el trayecto. Un testigo presencial afirmó que la camioneta lo sobrepasó a gran velocidad mientras él circulaba a 120 km/h, y que el imputado venía realizando múltiples maniobras peligrosas contra otros vehículos.
Además del material reunido en la escena del accidente, la fiscalía incorporó: el acta de procedimiento del Cuerpo de Seguridad Vial, elementos secuestrados en la camioneta y en allanamientos en su vivienda, pericias accidentológicas que confirmaron la velocidad mínima superior a 170 km/h, exámenes toxicológicos, imágenes de cámaras de seguridad de un bar de Allen e información patrimonial que acredita su solvencia económica.
Los abogados querellantes acompañaron íntegramente la imputación, mientras que la defensa intentó responsabilizar a la víctima, argumentando que el accidente habría comenzado con una supuesta maniobra imprudente del conductor de la EcoSport.
La fiscalía, por su parte, rechazó esa estrategia e insistió en que “la única conducta penalmente relevante es la del imputado”.
Fuente: Infobae

