El mensaje se encontraba en la cocina. Con una caligrafía errática y desordenada, se llega a leer también un “lo sien…”.
Parte de lo que decía la carta que dejó Laura Leguizamón, sindicada por los investigadores del triple crimen de Villa Crespo como la mujer que mató a su esposo y sus hijos y luego se suicidó. Las fuentes habían comentado que en el texto, desordenado, se leía “muy perverso”. Este jueves, este medio accedió a la foto de ese documento clave. Manchas de sangre y un “lo sien…” que se distingue en el margen inferior derecho son parte de las peculiaridades de una imagen que da cuenta del horror.
“Con lo que iba a pasar”, “todo mal muy perverso”, “les arruinaba la vida”, “mis padres”, se lee como un abanico alrededor de un “íbamos a la calle”, “fue mucho”, “los amo” y un “lo sien…”.
El papel fue hallado en medio de una escena macabra dentro del departamento 6A del edificio ubicado sobre la calle Aguirre al 200: los cuatro cuerpos estaban tirados en varios ambientes de la vivienda, cubiertos en sangre. Todos tenían varias heridas de arma blanca. Se sospecha que, para cometer los asesinatos, Leguizamón habría usado un cuchillo y una cuchilla grande, ambos secuestrados por los peritos.
El dato que estremece es que, por las lesiones, se pudo constatar cuántas veces aproximadas habrían sido apuñaladas las víctimas antes de morir.
Adrián Seltzer, de 53 años y padre de familia, tenía tres puñaladas en su pecho. Lo encontraron en su dormitorio y sin signos de haberse movido de la cama. Los investigadores creen que estaba dormido, incluso que había tomado un tranquilizante, cuando recibió los puntazos.
En el cuarto matrimonial, además, se halló uno de los dos cuchillos que, sospechan, usó la mujer para cometer los crímenes y suicidarse.
Ian e Ivo Seltzer, de 15 y 12 años, tenían heridas que denotaban que habían sido acuchillados entre 10 y 12 veces cada uno. Habrían intentado resistirse y escapar del ataque perpetrado por su madre, según la hipótesis primaria del caso.
El menor de los hermanos fue encontrado en el pasillo del departamento por la empleada doméstica, quien luego contactó a la Policía. Los agentes posteriormente descubrieron al mayor de los adolescentes en el comedor. Según la reconstrucción inicial, Ian fue atacado en su habitación, logró correr herido y finalmente fue asesinado en ese lugar, presentando heridas de arma blanca en el pecho y espalda.
La mujer, en cambio, estaba situada en el baño, sobre el bidet, aunque se habría acuchillado en la cama al lado de su pareja y luego arrastrado hasta allí. Tenía heridas en las muñecas y lesiones mortales en el pecho compatibles con el perfil de una persona que se suicida por arma blanca. La data de muerte y el rigor cadavérico confirmó que fue la última en morir.
“En el cuello tenía una uña clavada, además de pelos en las manos o pelusas mezcladas con pelos”, describieron el estado del cuerpo de la mujer.
Fuente: Infobae